viernes, 29 de enero de 2010

OMS confirmó retroceso de la gripe AH1N1 en la mayor parte del mundo




(EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó hoy que la pandemia de gripe A ha retrocedido en la mayor parte de países y que se han superado los niveles máximos de transmisión en Europa y en Norteamérica. También se ha superado el nivel más alto de propagación del virus AH1N1 en el norte de África y en Asia.
Según un informe publicado hoy por el organismo, la pandemia ha causado la muerte de 14.711 personas desde el pasado abril, cuando se detectaron los primeros casos en Norteamérica. Esa cifra supone 569 decesos más que los registrados hace una semana.Por regiones, el mayor número de muertes se registró en América (7.166), seguido de Europa (3429), mientras que África ha sido el continente menos afectado con 133 muertes.
En Europa, la transmisión del virus se mantiene actualmente en el centro, el este y el sudeste del continente, aunque se observa una clara tendencia hacia la baja.
No obstante, ciertos países, como Austria, Albania, Bulgaria, Eslovaquia y Rusia han informado de ligeros aumentos en el número de infecciones desde enero, pero que se mantienen por debajo de los niveles de propagación que se registraron el pasado noviembre.

martes, 19 de enero de 2010

Chan: "Hemos tenido suerte con el virus de la gripe"


"Hemos tenido suerte con el virus de la nueva gripe. Inicialmente se propagó por países con buenos sistemas de vigilancia. Si hubiera mutado, estaríamos afrontando consecuencias muy graves". Así empezó el apartado dedicado a esta enfermedad la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, durante su discurso de apertura de la reunión del Consejo Ejecutivo del organismo, ayer.

Chan aprovecha cada intervención pública para defender su gestión de la crisis del H1N1, criticada desde algunos sectores por alarmista y por connivencia con las farmacéuticas. "El virus no mutó a una forma más virulenta. La resistencia al oseltamivir no se propagó. Se ha demostrado que la vacuna es segura y eficaz ante el virus circulante. Y las cosas podían haber ido mal en cualquiera de estos aspectos", resaltó. La organización, que protagonizará a su pesar una sesión del Consejo de Europa, ha encargado una auditoría externa con el propósito de defender las decisiones adoptadas en relación con la pandemia.

"Durante cualquier emergencia de salud pública, los responsables sanitarios deben tomar decisiones urgentes en una atmósfera de considerable incertidumbre científica. Como nuestra obligación es salvaguardar la salud pública, la tendencia es casi siempre la de equivocarse por exceso de precaución. Todos preferimos una pandemia leve con un amplio surtido de vacunas a una pandemia grave con un suministro inadecuado de inmunizaciones", manifestó Chan.

Convencimiento

La responsable de la OMS está convencida "de que cuando se escriba la historia de esta pandemia, la rapidez en la que los Gobiernos tomaron las decisiones para proteger a las poblaciones obtendrá las mejores calificaciones".

Chan mantiene sus reservas sobre la evolución del virus: "En algunos países del hemisferio norte la pandemia está remitiendo. Lo peor ha podido pasar. Pero sería insensato sacar conclusiones antes de abril, cuando acaba la temporada habitual de gripe. Aún queda mucho invierno. Además, no podemos predecir lo que va a suceder desde ahora hasta el final de año, cuando el hemisferio sur entre en su temporada de gripe y el virus se vuelva más transmisible".

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El ruido de la pandemia, las nueces de la gripe

Vivimos periódicamente con amenazas que nos atenazan y que nos advierten de la inminencia de catástrofes globales o de tragedias que nos acercan al apocalipsis. Por desgracia, muchas son ciertas, tangibles y dolorosas, pero hay otras alertas que en su día causaron revuelo y desasosiego mundial y que, hoy por hoy, no son más que castillos en el aire. El asunto de la pandemia de la gripe nueva o gripe A, provocada por el virus A/H1N1, es sin duda uno de los ejemplos más claros. Se parece a aquella famosa máxima de Horacio: parirán los montes y nacerá un ratón ridículo. O también se podría aplicar al caso lo de mucho ruido y pocas nueces. Los ciudadanos lo recuerdan, porque el ruido fue tremendo, consistente y continuado. No hubo día en que no hubiera una declaración de presuntos expertos más inquietante que la del día anterior. Seguimos con el corazón en vilo el ascenso del termómetro gestionado por la Organización Mundial de la Salud. Los niveles de alarma al alza se concretaron al fin en una declaración de pandemia que con la simple invocación del nombre presagiaba casi una plaga medieval. Las nueces han sido muy pocas. En el Tema del Día que hoy publica LA VOZ queda a las claras que la nueva gripe no solo no ha sido letal sino que, incluso desplazando a la infección estacional de cada año, ha representado la ola más benigna desde que se tienen datos fiables sobre epidemias de este tipo. Incertidumbre y perplejidad parece que son las dos palabras que más se usan en los medios científicos, sorprendidos de la evolución del virus. Lo que en sí es una buena noticia (por el bajísimo número de víctimas en comparación con otros ejercicios) se convierte de inmediato en resquemor si analizamos el papel de la OMS en su faceta de centinela mundial. Se rebajaron en su día los requisitos y protocolos propios de la organización para declarar una pandemia en beneficio de las empresas farmacéuticas que han elevado de forma colosal sus ingresos gracias a la cantidad ingente de vacunas adquiridas por la Administración para hacer frente al virus? Fue excesiva la alerta? Y, si lo fue, tuvo su origen en un mal cálculo científico o en un aviso precipitado, o fue a causa de una oscura operación económica? La OMS tendrá que responder urgentemente a estas preguntas. Su prestigio está en juego, y con él la credibilidad de todos aquellos que velan por algo tan delicado como la salud.